TENGO FRÍO

Es lo mas natural que en pleno agosto Elle tenga frío!.
Pero este frío no pasa así como así, no se calienta su cuerpo con varias

mantas y unos leños en la salamandra.

Su frío va mas allá del clima del invierno, aunque estar fuera de

casa tampoco ayuda a recobrar el calor que necesita.

Elle tiene un frío indescriptible en el alma, que recorre su cuerpo de

pies a cabeza, da vueltas por su cerebro y se aloja en sus ojos y en

su corazón.

Llega y se mete en la cama pero el calor de su hombre tampoco la

ayudan a recobrar el suyo, sigue tan fría!!... como si la muerte le

estuviera haciendo una brevísima visita.

Misterios de la edad?... Sus hormonas le estarán jugando una mala

pasada?... No logra el calor que conoce bien y le ayuda a seguir.

Es ese calor sin límites, pero del bueno, que le ayuda a levantarse
cada día, a pensar con fuerza que hoy sí puede a pesar de…

El frío sin limites que siente la agota, le quita el deseo
de seguir porque todo en sí misma se entumece,
sus pensamientos se niegan a ver un camino placentero que le lleve
a recorrer sus sueños, le angustia hasta las lágrimas pensar
que nada tiene sentido, que está sumergida en aguas turbulentas
donde no puede hacer pie, se siente vulnerable,
ese árbol frío que tiene delante no le permite ver
el bosque que la cobijará y le devolverá el calor que tanto necesita
para seguir, sólo seguir… un poco más…
si anduvo tanto!... vamos… un poco más…!!

¡Que injusto es todo!... Elle piensa que cuando tuvo la edad de gozar del

frío y también del calor, ni siquiera reparó en ninguno de los dos. O sí…

tuvo tiempos de mucho frío y nadie le acercó una cobija… tuvo tiempos de

mucho calor y sólo unos pocos le alcanzaron agua fresca.
Lo demás tuvo que proveérselo por sí misma.
No es que quería dar pena, ni arrastrar la frazada
como un perrito lastimoso, sólo quería que alguien le calentara el alma.

Los años pasaron… y el frío sin límites le cala los huesos y Elle no sabe si

quiere seguir así hasta su final o va a esperar un milagro divino,

ese que todos en algún momento anhelan fervientemente,

sólo para poder dar ese paso que la lleve a cumplir con

todo lo que aún tiene por hacer.

Fuerza Elle… pudiste muchas veces, por qué no ahora?

Ahí está a la mano la primavera… estirá los brazos ilimitados

de tu corazón… vamos ya casi llegás.

Ni frío en demasía, ni calor abrazador, lo justo para que

los engranajes de tu vida sigan en movimiento.

Todo es perfecto… Dios no hace nada a medias…

Dale tu mano, Él te espera con una flor…